Erick Berssain García Ventura, estudiante de Ingeniería en Computación, junto con otras tres personas en su equipo, obtuvieron el primer lugar en el Global Entrepreneurship Summer School llevado a cabo en Shanghai, China, durante la semana del 27 de agosto al 3 de septiembre.

Esta escuela de verano, dirigida por la Academia de Emprendimiento Social en Alemania y organizada por universidades de Münich, México y China, es una escuela destinada a formar futuros empresarios responsables y creadores de proyectos enfocados a resolver problemáticas de interés mundial. En este año las discusiones y propuestas se formaron en torno a la alimentación.

Después de seis días de clases intensivas y prácticas de campo, el equipo de Erick García presentó la idea completa de una empresa que se dedicará a rescatar verduras que los grandes supermercados desechan a pesar de estar todavía en buen estado.

De esta manera, ganaron el premio al mejor Billion Dollar Project to Foster Societal Change, con el cual tendrán la oportunidad de llevar su idea al siguiente nivel con la asesoría de mentores y expertos en el tema. Actualmente, se está buscando emprender este proyecto en Alemania.

Iniciativa para mejorar el mundo

Desde su creación en 2008, Global Entrepreneurship Summer School se ha dedicado a combinar la educación, el espíritu empresarial y la creación de vínculos profesionales para el desarrollo sustentable. Cada año se reúnen 35 estudiantes en cada sede (Münich, Ciudad de México, Shanghai) para emprender ideas que mejoren la situación del planeta, por ejemplo, basura, migración, desempleo en jóvenes y paz.

Para ingresar a este programa, Erick García presentó trabajos escritos divididos en tres ejes temáticos: problemas de alimentación en México, la importancia de discutir sobre la comida y la manera en que este curso de verano ayudaría a su crecimiento profesional. Erick consideró como temas de su proyecto los principales problemas de alimentación en el país: obesidad y desnutrición.

El alumnos de la FI fue aceptado en la Universidad de Tongji, China: asistió a talleres y cursos sobre el proceso de creación de modelos de negocios, problemas acerca de la comida y cómo vender una idea; paralelamente él y su equipo, conformado por dos estudiantes alemanes y uno de China, se dedicaron a hacer investigación de campo en Shangai e indagar en los problemas de alimentación: "Descubrimos que el supermercado Alibaba vende productos frescos, los cuales si no son comprados antes de su fecha límite de venta, la tienda los tira a la basura", comenta.

Decidieron comprar algunos vegetales destinados a desecharse, en principio para revenderlos; sin embargo, lo descartaron porque el reembolso no sería suficiente ni tendría gran impacto, y lo orientaron hacia una propuesta de comida vegetariana con un procesamiento simple: mediante la deshidratación de las verduras.

Un plan contra la obesidad y la desnutrición

En Shanghai se desperdician 100 mil toneladas de comida al año, un tercio de lo que se produce en el mundo, según las investigaciones de Erick; la idea de rescatar la comida que se va a tirar a la basura y convertirla en un alimento sano y nutritivo es una solución a este problema, además de que ayuda a combatir la obesidad, pues no contiene grasas ni altos contenidos de sodio.

"Una tarde picamos jitomate, zanahoria, apio, chile y cilantro y añadimos un poco de sal; obtuvimos un producto deshidratado, sin conservadores y algo picante, con la opción de añadirle agua caliente para preparar una sopa. En la fase de prueba, a la gente de Shanghai le gustaba y contestaban que sí lo comprarían".

Hicieron un estudio de mercado y de las competencias para conocer el costo de producción en el primer año y de lo relativo a establecer la empresa en términos de administración y de logística, el cual arrojó un estimado de 200 mil yuanes, 80 mil pesos aproximadamente.

Con la premiación al mejor proyecto, esta idea ya está validada para ponerse en marcha en Alemania; sin embargo, el plan es que se inicie en los tres países participantes. Erick García desea hacer realidad esta iniciativa en México, con el fin de erradicar los problemas de obesidad y desnutrición.

"Saber que estás colaborando en una causa que va más allá de tu país, pues se trata de un problema global, impactó en mi forma de trabajar. Todos ayudamos y aportamos para cumplir el objetivo", concluyó.