El Coloquio del Programa de Alto Rendimiento Académico (PARA), que organiza la Secretaría de Apoyo a la Docencia, a través de la Coordinación de Programas de Atención Diferenciada para Alumnos (Copadi), inició este ciclo 2018-2 con la conferencia Experiencias PARA compartir, impartida por el doctor Carlos Romo Fuentes, profesor de la FI adscrito a la Unidad de Alta Tecnología (UAT), el 28 de febrero, en el Auditorio Raúl J. Marsal.

La conferencia mostró la trayectoria en el campo de la ingeniería del ponente como un ejemplo inspirador para los estudiantes. Carlos Romo estudió la carrera de Ingeniería en Telecomunicaciones (generación 1997), en ese entonces de ingreso derivado de la de Eléctrica Electrónica.

Formó parte de una de las primeras generaciones del PARA que le brindó muchos apoyos que le fueron de utilidad, destacando en primer lugar la tutoría, pues recibió consejos de cómo organizar su tiempo, establecer prioridades a lo largo de la carrera, e incluso sobre cuestiones personales, por lo que aconsejó a los actuales integrantes del PARA mantener el contacto con sus tutores durante todos los semestres.

Se refirió a los cursos y talleres de capacitación a los que asistió y resaltó uno de Redacción y comprensión del español culto, pues es de suma importancia saber expresar el conocimiento por escrito de manera adecuada particularmente para la redacción de la tesis y los reportes del servicio social. Otros apoyos muy útiles fueron las asesorías académicas y el curso del idioma inglés.

En el 2001 se tituló con mención honorífica con una tesis en equipo sobre un sistema de control de navegación autónoma para un vehículo marítimo basado en el sistema GPS. Posteriormente, trabajó como programador en una empresa de servicios financieros y realizó un curso de gestión de las telecomunicaciones, en Madrid, aoyado por el PARA.

La FI le dio la oportunidad de acceder al posgrado en Rusia, en la Universidad Estatal y en el Instituto de Aviación de Moscú, como parte del Programa científico-tecnológico de colaboración entre la Federación Rusa y México para el periodo 2003-2009.

De esta manera, cursó la maestría y el doctorado, con el objetivo de participar en un proyecto de preparación y lanzamiento de un micro satélite ruso-mexicano de percepción remota de la ionósfera terrestre para el estudio de precursores de actividad sísmica.

Transcurridos los cinco años, regresó directamente a la FI a compartir el conocimiento aprendido y a hacer una estancia posdoctoral con apoyo de la Dirección General de Asuntos del Personal Académico y el Conacyt.

Recordó que su incorporación requirió de tiempo, ya que el área aeroespacial era incipiente en la Facultad. Su contribución en este sentido fue muy significativa: generar un módulo terminal en sistemas espaciales y proyectar un laboratorio ad hoc.

Buscar proveedores, idear el diseño, la infraestructura, el material e instrumentación y conseguir el presupuesto Conacyt para jóvenes investigadores fueron esfuerzos que hoy en día se traducen en el Laboratorio Nacional de Ingeniería Espacial y Automotriz en las instalaciones de la UAT de la FI en el campus de Juriquila, Querétaro.

El trabajo del doctor Romo para impulsar el área espacial en la institución se ha mantenido constante. Mediante la colaboración con el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés) un grupo de estudiantes fue a Estados Unidos para aprender una metodología de diseño de nanosatélites, complementando la técnica rusa con la norteamericana y, trabajar en una mexicana.

De la colaboración con el MIT surgió también uno de los grandes proyectos en los que ha participado: el microsatélite Quetzal para el monitoreo de contaminación atmosférica en ciudades de América Latina.

El doctor Carlos Romo es miembro fundador y representante la Red Temática de Ciencia y Tecnología del Espacio que reúne a un grupo de investigadores y empresarios en torno a proyectos de tecnología espacial en el país.

En el ámbito académico, actualmente imparte seis asignaturas en la FI y ha dirigido una decena tesis. Además, está involucrado en proyectos PAPIIT y PAPIME enfocados en desarrollar instrumentación aeroespacial.

Para concluir, el doctor Romo enfatizó lo mucho que aportó a su formación el hecho de haber formado parte del PARA, e instó a los jóvenes de la generación actual a aprovecharlo.