Facebook
Gaceta digital FI Ingenieria en Marcha
Comunicafi TVIngenieria comunicafi_unam
Cultura y deportes
2018-04-20
Yogi Lama Gursam en la FI
En su tercera visita a nuestra facultad invita a alumnos y profesores a practicar la meditación.
Por: Eduardo Martínez Cuautle
Fotografía: Eduardo Martínez Cuautle
Comunicafi
Yogi Lama Gursam

El pasado 20 de abril, invitado por Omar Alejandro Llanes, profesor de las Divisiones de Ingeniería Mecánica e Industrial y de Ciencias Sociales y Humanidades, el Yogi Lama Gursam compartió sus vivencias y conocimientos de la religión y cultura budista ante un grupo de alumnos de las materias de Creatividad y Creatividad e innovación de la carrera de Ingeniería Industrial y del Taller Socio Humanístico de creatividad, optativa en la DCSyH, con el objetivo de incentivar en los alumnos la flexibilidad de pensamiento, conocimiento y apertura a la novedad, tres ejes esenciales del proceso creativo.

Aunque nace en India, Lamma Gursam es tibetano y desde pequeño tuvo una vida muy complicada debido al estatus de refugiado, que aún conserva. A la edad de seis entra al monasterio y permanece ahí por veinte años hasta que se le presenta la oportunidad de salir a cursar una carrera universitaria e incluso una maestría en filosofía budista, además de aprender otros idiomas (tibetano, hindi y sanscrito). Al terminar su posgrado regresa al monasterio por otros siete años a compartir sus conocimientos. Comentó que reconoce la importancia de la educación en el desarrollo de una persona y una comunidad ya que él fue muy afortunado en poder continuar sus estudios siendo un refugiado.

En 1995 viaja por primera vez a Estados Unidos y se dedica a dar clases y difundir los preceptos budistas además de en Canadá, México y distintas partes de Europa. Comentó que durante sus viajes realiza voluntariado en prisiones dando cursos a los internos, asiste a grupos de AA, a universidades y refugios de animales. Las clases, conferencias y cursos que imparte hoy en día están orientados a la ciencia de la mente y cómo trabaja, sobre las distintas emociones que experimentamos los seres humanos y cómo controlarlas, estando conscientes de ellas y así poder dejar ir las emociones negativas.

A los 30 años decide dejar de ser monje y convertirse en yogi; actualmente vive en pareja con Gabriela Heatley, quien funge como traductora.

En la segunda parte de su charla, habló de la importancia del retiro en la formación budista e invitó a los alumnos a que realicen ejercicios de contemplación alguna vez de acuerdo a sus propias necesidades. Hay diferentes tipos de retiros, algunos muy estrictos en los cuales se debe permanecer durante varios años en una sola habitación y unos mucho más simples de uno o varios meses o incluso de un solo día.

En la tradición del budismo tibetano se acostumbra que un monje realice un retiro de tres años para que sea digno de llamarse Lama (maestro). Él realizó dentro de su camino al conocimiento un retiro de más de tres años, en el que se encontró prácticamente aislado del mundo exterior, haciendo énfasis en distintas prácticas encaminadas al dominio de la mente, el autoconocimiento y la meditación. Actualmente continua llevando a cabo esta práctica por varios meses al año. "No es malo estar rodeado de familiares y amigos... tampoco es malo ir a un retiro sin ninguno de ellos".

Debido a que México es "imprevisible", una asistente cuestionó al Lama Gursam, ¿es un mal practicante quien hace meditación en casa, al llegar al trabajo y a pesar de eso le gana la ira y se enoja?, el Yogi respondió: "Quien hace meditación es un buen practicante si a pesar de montar en cólera es capaz de distinguir sus emociones y de dejar ir su enojo; no es fácil hacerlo se requiere de mucha práctica. Desde el punto de vista de la meditación y de la ciencia de la mente, el enojo no es nuestra verdadera naturaleza, es la compasión; el enojo solo nos destruye a nosotros mismos".