Durante el XVIII Ciclo de Conferencias de la División de Ingeniería Civil y Geomática, el maestro Francisco Javier Granados, investigador del Instituto de Ingeniería de la UNAM, impartió el pasado 14 de marzo la conferencia Perspectivas de la Infraestructura en el Transporte Urbano de la Ciudad de México: Caso Teleféricos, en la que presentó algunos puntos del plan estratégico de movilidad: infraestructura peatonal, ciclista, vial y de transporte público.

El plan estratégico se basó en la opinión de los usuarios recolectada en la Encuesta Origen Destino en Hogares de la Zona Metropolitana del Valle de México 2017, diseñada por el Instituto de Ingeniería, en la cual se concluye que la movilidad en la Ciudad de México es un sistema fragmentado, altamente ineficiente y que profundiza inequidades sociales.

El maestro Granados detalló que también existe material rodante obsoleto, baja inversión en seguridad de peatones, poco uso e infraestructura insuficiente de transporte no motorizado, rezago y falta de transporte en zonas marginales de la ciudad, por falta de recursos o por ser áreas de difícil acceso. "El patrón de movilidad es distinto en el centro y en la periferia urbana, en esta última los viajes comienzan desde las 4 de la mañana y pueden tener tiempos de más de 1 hora y 30 minutos hasta el lugar de trabajo".

En este sentido, el plan estratégico está dividido en tres redistribuciones: la de los modos, que busca alternativas sustentables y favorecimiento de la caminata, el uso de bicicleta y de transporte público, la del espacio vial que prioriza su circulación rápida y segura, , y la de los recursos que privilegien la inversión en infraestructura de transporte público y no motorizado.

"Estos tres puntos se ligan con el proyecto de la construcción de teleféricos, pues la idea es dotar de un sistema de transporte de calidad, seguro y eficiente a aquellos lugares, sobre todo las partes altas, con poca accesibilidad y de escasos recursos", explicó.

El cablebús es una infraestructura de transporte público que pretende conectar zonas que necesitan un transporte alterno con otros medios como el metro. Hasta ahora hay cuatro anteproyectos en los cuales se está trabajando en la planeación de trayectoria, número de estaciones y demanda estimada: Cuautepec (Norte), la Sierra de Santa Catarina (Oriente), el Ajusco (Sur), y Santa Fe.