La División de Ingeniería Mecánica e Industrial (DIMEI) y su Departamento de Ingeniería en Sistemas Biomédicos (DISB) llevaron a cabo la Jornada de Inclusión y Discapacidad el pasado 3 de mayo en el Auditorio Sotero Prieto, con la finalidad de crear consciencia en los estudiantes sobre las implicaciones de la discapacidad y la importancia de establecer una sociedad que garantice la igualdad de los derechos humanos.

En la inauguración estuvieron la licenciada Claudia Cervantes Maldonado, de la Comisión Local de Seguridad de la FI, y el comité organizador del evento encabezados por el maestro Serafín Castañeda Cedeño, jefe del DISB, quien mencionó que en México existen más de 7 millones de personas con discapacidad en sus distintos tipos: motriz, auditiva, visual, intelectual y psicosocial. "Este día estará dedicado a preguntarnos ¿qué podemos hacer para que las personas con discapacidad se integren a la sociedad? partiendo de la idea de que todas las personas, con o sin discapacidad, tienen los mismos derechos y obligaciones".

Destacó que debe haber una transformación en el pensamiento de la población desde sus instituciones básicas hasta los mitos, con el fin de que haya servicios y bienes accesibles e inclusivos. "En un futuro, los egresados de la FI propondrán acciones que garanticen la inclusión con el fin de mejorar la calidad de vida y la igualdad de derechos para las personas con discapacidad", finalizó.

La Jornada se integró por una exposición de carteles de proyectos, conferencias, una mesa redonda y talleres de lengua de señas, lenguaje braille y de formación de profesores para atender a alumnos con discapacidad visual.

Las primeras conferencias giraron en torno a los conceptos básicos de discapacidad e inclusión, explicados por la doctora Alicia Angelica López Campos, fundadora y coordinadora del Comité de Atención a las Personas con Discapacidad de la UNAM, y la maestra Leticia Chávez Martínez, académica en el Universum y divulgadora de la ciencia. Ambas coincidieron en que la clave para entenderlos es "diversidad", la cual se refiere a la diferencia o distinción y a la variedad entre las personas, en otras palabras, comprender que toda la gente es diferente, no obstante, todas deberían tener las mismas oportunidades y derechos.

La doctora López Campos dijo que el concepto de discapacidad ha ido evolucionando: en la década de 1980 la Organización Mundial de la Salud (OMS) creó esta clasificación para ser entendida en distintos contextos: deficiencia (disminución o pérdida de la función de una parte del cuerpo), discapacidad (limitación que hay en la acción y que refleja problemas en la persona) y minusvalía (el impacto del problema en el contexto social y su desarrollo).

Con base en esta clasificación, la discapacidad se define como "la restricción o la ausencia debido a la deficiencia de la capacidad para realizar alguna actividad; es el impacto de las condiciones crónicas de salud, las cuales repercuten en cómo la persona funciona".

En 2001, la OMS hace una nueva clasificación que observa a las personas con discapacidad de manera más integral dentro del contexto social, en un proceso interactivo y multidimensional desde su función dentro de una comunidad hasta sus necesidades personales. "Este modelo reconoce que sí hay una limitación en el funcionamiento intelectual, físico, mental o sensorial y que requiere de apoyos significativos en las habilidades de la vida diaria para lograr su autonomía; este paradigma le da peso a los derechos humanos, los cuales son iguales para todos", explicó la doctora López Campos.

Las estadísticas de 2018 de la OMS indican que hay un poco más de mil millones de personas con alguna discapacidad en todo el planeta, y esto va en aumento, debido a las condiciones actuales de vida. "Hay que tener en cuenta que la discapacidad será uno de los motivos de más preocupación en un futuro cercano, además de que son un sector de la población con los peores resultados en servicios: salud, educación, empleo y de acceso a la información", finalizó.

En su turno, la maestra Chávez Martínez detalló que en Universum siempre tienen en cuenta la diversidad de personas que asisten al museo como parte de un proyecto de inclusión a la cultura científica llamado Universum para Todos. La inclusión tiene que ver con las atenciones y servicios para un sector de la población, dijo, con el fin de que los espacios y las oportunidades sean más accesibles hasta llegar a un punto de igualdad entre las personas con y sin discapacidad, a través de procesos que aumenten la participación y disminuyan la exclusión, que reestructuren las políticas y las prácticas para atender a la diversidad y que fomenten el respeto mutuo y la comunicación.

"Desde el simple hecho de crear un ambiente inclusivo, donde personas sin discapacidad pueda notar los señalamientos y espacios exclusivos, se está creando una cultura de inclusión para todo el público en general. La educación inclusiva pretende que todos los miembros de la comunidad se sientan acogidos y valorados", opinó la maestra Chávez.

Para terminar, ambas especialistas exhortaron a los futuros ingenieros que antes de crear un proyecto que pueda ayudar a las personas con discapacidad es indispensable conocer a la comunidad a quien pretenden dar apoyo, a fin de que sepan sus necesidades y así hacer un diseño específico para sus requerimientos; para ello, expresaron, lo mejor es erradicar estigmas y tabús, y así crear un verdadero cambio en la cultura inclusiva.