El equipo del Laboratorio de Tecnologías de Lenguaje de la Facultad de Ingeniería, encabezado por el doctor Abel Herrera Camacho, desarrolló un sintetizador de voz en español de México que fue integrado a un robot humanoide de última generación, único en México y América Latina, creado por investigadores de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).

El 26 de junio en el Centro de Docencia Ingeniero Gilberto Borja Navarrete, los doctores Abel Herrera y David Pinto Avendaño de la BUAP realizaron una presentación del funcionamiento del robot y hablaron de la génesis del proyecto.

El doctor Pinto explicó que la colaboración con su colega de la FI surgió de su deseo de que el humanoide hablara en español, sin embargo, los sintetizadores existentes tenían el acento de España y algunos tenían voces que se escuchaban muy computarizadas. En una reunión que auspicia Conacyt, conoció al doctor Herrera y el trabajo que realiza en su Laboratorio, en especial el corpus de voz.

Gracias al sintetizador desarrollado en la FI, Arthur es capaz de decir cualquier frase en español con una voz prestada por el ingeniero Ernesto Mendoza, conductor del programa de radio Ingeniería en Marcha, quien colaboró en sesiones de grabación realizadas en el CCADET.

El doctor Herrera destacó la importancia de crear tecnología nacional en el rubro de la Ingeniería del Lenguaje, pues este tipo de sintetizadores tienen un alto valor comercial; empresas como Microsoft o Apple que los desarrollan y utilizan para los asistentes personales de sus dispositivos no comparten información.

En consecuencia, las instituciones o empresas del país se ven obligados a consumir la tecnología extranjera, como los bancos que utilizan mensajes de voz computarizados para sus usuarios. Por ello, uno de los objetivos del doctor Herrera es generar patentes propias.

Por su parte, el investigador de la BUAP señaló la importancia de contar con el sintetizador en español para hacer posible la interacción del robot con la gente de este país y poder utilizarlo en programas de apoyo a distintos sectores, como en la terapia a niños con algún desorden de habla causado por labio leporino o por paladar hundido. Al hablar con los menores, Arthur detecta sus problemas de pronunciación y posteriormente sugiere ejercicios específicos para mejorarla.

Otro programa de la BUAP está enfocado en adolescentes de secundaria para detectar cambios súbitos en su comportamiento e identificar focos rojos para canalizarlos con especialistas. También se espera usarlo en tratamientos en geriatría cuando se tenga terminado el cuerpo del robot, al que le faltan brazos y manos.

"Los usos que le podamos dar llegarán hasta donde alcance nuestra imaginación", resume Abel Herrera, y agrega que con los constantes avances tecnológicos, el robot será mejorado sistemáticamente, abriendo posibilidades.

Por lo pronto, las mejoras que ya tiene planeadas son naturalizar aun más la voz del robot, hacer que pueda emitirla expresando diferentes emociones e incorporarle registros de diferentes regiones del país para adecuarlo a los usos locales.

Aparte de la voz, el mayor avance tecnológico de Arthur está en su tipo de piel, hecha de un material llamado frubber que le permite realizar expresiones faciales detalladas para comunicar determinadas emociones. Para ello cuenta con 23 motores bajo la piel del rostro, 1 detrás de la cabeza y 3 en la parte inferior para mover el cuello; además, cuenta con 2 micrófonos y 2 cámaras para la interacción con humanos.

Durante el evento, el doctor Abel Herrera presentó a su equipo de trabajo compuesto por estudiantes de licenciatura y de los posgrados de Ingeniería Eléctrica y en Computación, además de una joven de la Facultad de Filosofía y Letras que apoya con la parte lingüística: Carlos Franco, Fernando del Rio, Oscar Navarrete, Jaime Reyes, Arturo Rivera, Julio Méndez, Aldo Ruelas, Juan Frías, Andrea César y José Trangol.