El pasado 12 de septiembre, durante la XIII Semana SEFI, se efectuaron las conferencias Disponibilidad Hídrica en el Norte de México ante el Cambio Climático, impartida por el doctor Carlos Agustín Escalante Sandoval, director de la FI, y La Ingeniería en la Reconstrucción del Patrimonio Cultural, por el ingeniero Roberto Heatley Cortés, ambas en el Auditorio Javier Barros Sierra.

El doctor Escalante habló sobre la planeación del recurso hídrico y la importancia de su análisis en zonas con riesgo de escasez de agua a causa del cambio climático, principalmente en los 12 estados del norte de la República Mexicana. "El manejo adecuado de las cuencas, basado en la planeación, debe ser un punto importante para todos los estudiantes de la ingeniería puesto que es un elemento fundamental para el desarrollo".

Destacó que es sustancial conocer la cantidad de agua que se va a disponer en un futuro tanto para la agricultura, el uso público, la producción de energía y la industria, con base en las condiciones climáticas actuales y en los futuros cambios que pueden reducir la cantidad y calidad, como la deforestación, sequías y sobreexplotación de acuíferos.

En tablas, presentó los pronósticos en cantidad de agua que podría haber en los años 2040 y 2100, ante situaciones sin y con cambio climático. "Necesitamos tomar en cuenta que la disponibilidad está asociada al factor de escala con el fin de tomar decisiones dentro de la planeación hídrica. Estos indicadores son importantes para saber, por ejemplo, cuánto, cómo y cuándo sembrar y para ubicar las pérdidas de agua y así evitarlas".

Para finalizar, resaltó que esta información es útil no solo para aquellos que se dedican a la ingeniería civil y las estructuras, sino también a las disciplinas relacionadas con ciencias de la tierra. "Pongamos atención en este momento sobre lo que se tiene que hacer en la planeación, de lo contrario no se pueden desarrollar proyectos nuevos, pues sin agua no habrá absolutamente nada de alimentos ni para consumo propio".

En su turno, el ingeniero Heatley mencionó que los sismos del 2017 dejaron aproximadamente 2340 bienes culturales dañados, la mayoría en Puebla, Oaxaca, Estado de México y Morelos, de los cuales 431 tienen daños severos; a un año de este desastre natural, la restauración no ha terminado.

Explicó que un patrimonio cultural se relaciona con la historia, arquitectura, ingeniería y la comunidad: "nosotros, los ingenieros, debemos tener en cuenta el sentido cultural de las comunidades al momento de enfrentarnos a una restauración".

Un proyecto de restauración es un plan de ingeniería en coordinación con otras disciplinas, las cuales se hacen responsables de los costos, financiamiento, el registro de los tiempos y programas. Para concluir, detalló algunas de áreas de consideración para administrar un proyecto: planeación, ejecución del proyecto y el control; asimismo, mencionó algunos factores que se den tomar en cuenta, como el alcance, la cantidad, el tiempo, el costo y la calidad.