En el marco del ciclo Planeación de la Infraestructura y Bienestar México y el Mundo, de la División de Ingenierías Civil y Geomática, el ingeniero Federico Dovalí Ramos, destacado profesor de la Facultad de Ingeniería, ofreció la conferencia Planeación de Aeropuertos en México el pasado 7 de noviembre en el Auditorio Raúl J. Marsal.

Explicó que en ciertos ambientes, la planeación se considera como un proceso obvio y de uso común, por lo tanto, no se realiza bajo un análisis detallado ni con reflexión sobre su significado. Como consecuencia, en casos extremos, los proyectos carecen de una planeación adecuada, lo cual genera decisiones que no resuelven ningún problema.

Definió la planeación como "un proceso muy complejo de previsión que debe ser debidamente interpretado y ejecutado para apoyar la solución a futuro de problemas que se identifican a partir de sus síntomas o manifestaciones".

Desde el punto de vista del usuario-pasajero, existen dos tipos de aeropuerto: los de origen-destino, en los cuales la presencia de los usuarios dependerá de sus propios intereses respecto al tipo y nivel económico de la región; y los de coalición, en los que la demanda de usuarios dependerá principalmente por la red de rutas e itinerarios que las aerolíneas ofrecen de manera independiente, con poca o nula intervención del aeropuerto.

En los aeropuertos de origen-destino, la planeación debe iniciar con la justificación: construir un aeropuerto donde no existe, ampliar uno que ya existe o construir uno totalmente nuevo con la posibilidad de cancelar el existente o bien de conservarlo.

Manifestó que la justificación de un aeropuerto solo será válida a partir de la relación entre el nivel de la economía de la población y su afinidad con el transporte aéreo; si no existe o no se presenta tan relación, el proyecto no es justificable y por lo tanto su construcción no es viable y no debiera suceder.

El siguiente paso en la planeación es el desarrollo del plan maestro, en el cual se establecen el tamaño y características que el aeropuerto deberá tener con base en valores de demanda y operaciones de pasajeros: la longitud de las pistas, zonas de pasajeros, de almacén y mantenimiento, la parte vial y los estacionamientos. Asimismo, determinará la superficie mínima de terreno necesaria, garantizará los cumplimientos de los requerimientos aeronáuticos de protección de los espacios aéreos, de suministros de servicios y del medio ambiente, y finalmente la accesibilidad terrestre de todos los usuarios, pasajeros, empleados, proveedores y visitantes.

Para lograr los objetivos de una planeación adecuada se debe seguir una metodología, una de las más usadas se apoya en una percepción retrospectiva del futuro: "se acepta que el futuro es una extrapolación simple del pasado, por tanto, requiere su estudio cuidadoso a través del análisis de las tendencias y del comportamiento de variables destacados".

Finalmente, el ingeniero Dovalí Ramos aclaró que su conferencia tuvo como objetivo principal plantear inquietudes de la ingeniería en cuanto a la planeación aplicada a los aeropuertos a fin de mantener una actualización permanente de conocimientos y de experiencias en todas las áreas y especialidades que ayuden a los estudiantes a ser mejores profesionistas.