Las estancias que realizan los alumnos de la FI en otras instituciones de educación superior, nacionales y extranjeras, amplían su visión en el campo de la ingeniería y contribuyen a su formación integral; pero también requieren de trámites, planeación y la asesoría adecuada, por ello, el Programa de Movilidad Estudiantil invitó a estudiantes que ya han pasado por esta experiencia a compartir sus anécdotas y consejos, el pasado 9 de noviembre en el Auditorio Javier Barros Sierra.

La ingeniera Gabriela Alfaro Vega, responsable del Programa, explicó que este contacto tiene el propósito disipar las dudas que estorban la intención de realizar un intercambio que tienen otros universitarios y de afirmarlos en su deseo mediante una plática entre pares que pueden darles una idea más certera de lo que implica.

Desde China hasta Edimburgo, los futuros ingenieros de la UNAM han tenido la oportunidad de demostrar y comprobar la extraordinaria calidad educativa que reciben en la máxima casa de estudios. "No olviden que están representando a la Universidad en el extranjero, llevan consigo más que un nombre, detrás de ustedes tienen un legado, tienen que ser muy congruentes con sus acciones y darle su justo espacio a las actividades académicas", invitó Citlali, quien estuvo en Japón.

Algunas de las circunstancias comunes que compartieron todos los alumnos, independientemente del país en el que realizaron su estancia, fue la emoción de estar en un nuevo lugar para estudiar y vivir, por lo que tener una mentalidad abierta es clave para el proceso de adaptación. Otro apoyo decisivo durante su tiempo en el extranjero fue la comunidad de estudiantes internacionales de cada universidad, que los llenó de amigos e hizo más soportable el estar lejos de su familia. "No se preocupen por hacer amigos, van a conocer gente de todo el mundo que al final se convierten en una red de trabajo para toda la vida", platicó lleno de entusiasmo Óscar Ornelas, quien estudió en República Checa.

Uno de los consejos más importantes fue mantenerse perseverantes, pues es común no ser aceptados en el primer intento, debido a la alta demanda y los pocos lugares disponibles. Por ejemplo, Manuel Díaz, de Ingeniería Mecatrónica, relató que no se quedó hasta la tercera ocasión. "Mantengan en mente lo que quieren, insistan una y otra vez y créanse merecedores de su sueño", aconsejó. Por ello, es importante familiarizarse con el costo de vida, los requisitos escolares y de inmigración, la oferta educativa y las convocatorias tan pronto como sea posible.

Una de las preocupaciones más comunes entre los alumnos a los que les interesa la movilidad estudiantil es el perder un semestre o atrasarse en sus créditos, pero todos los que compartieron sus experiencias coincidieron en que sin duda volverían a hacerlo, pues es algo que te cambia la vida, la perspectiva, te ayuda a conectarte con lo que te apasiona, te llena de confianza y te inspira a buscar lo máximo. "Cumplí muchas más metas de las que imaginé, vi cosas que jamás creí poder presenciar, me di cuenta de que lo que te propongas se puede hacer", concluyó David Navarrete, de Ingeniería Industrial.