En el marco de los Coloquios del Programa de Alto Rendimiento Académico 2015 (PARA), organizados por la Secretaría de Apoyo a la Docencia y su Coordinación de Atención Diferenciada para Alumnos, el ingeniero José de Jesús Vargas Hernández impartió la conferencia Actualidad en la Industria Petrolera, el 27 de abril, en el Auditorio Sotero Prieto.

El ingeniero de Vargas considera que la industria petrolera nacional pasa por una etapa de incertidumbre debida a la Reforma Energética y al perfil de producción que ha caído en los últimos años.

Las reservas petroleras, explicó, se clasifican, según el grado de probabilidad para que la extracción de hidrocarburos sea económicamente viable, en tres tipos: probadas, si se tiene la certeza de que la inversión será recuperable en una fecha específica; probables, cuando requieren la implementación de recursos tecnológicos adicionales para que sean recuperables, y posibles, si necesitan de información geológica, geofísica, petrofísica y de ingeniería para determinar su viabilidad.

Para ilustrar, hizo mención de datos proporcionados por Pemex en enero de 2014 sobre las reservas petroleras en México: 13.4 mil millones de barriles de aceite, probadas; 11.4, probables; y 17.3, posibles. Se trata de algo preocupante, opinó, pues el 70 por ciento de las probadas ya ha sido desarrollado, mientras que la mayor parte de las probables y posibles se encuentran en yacimientos como el de Chicontepec, donde la falta de caracterización estática dificulta la salida de los hidrocarburos.

Apuntó que actualmente se extrae en promedio un 30 por ciento de los hidrocarburos disponibles en cada pozo, mientras que el 70 restante se queda bajo tierra. El precio del petróleo es otro problema grave, debido a que incrementa los costos de producción y cuando un yacimiento deja de ser rentable se desclasifica como reserva.

Es por ello que la industria se enfrenta a los retos de desarrollar tecnologías que permitan obtener los recursos de las reservas probables y posibles, capacitar personal y promover la investigación. Concluyó que es un campo abierto a muchas ramas del conocimiento, porque, además de petroleros, requiere el talento de ingenieros geólogos, geofísicos, mecánicos, industriales, químicos, eléctricos, civiles y en computación.