En el segundo día de actividades (28 de junio) del IX Coloquio Modelos de Intervención Áulica, la doctora Magda Patricia Sánchez Rivas, profesora de la Facultad de Filosofía y Letras, ofreció la conferencia El síndrome del cuidador, en el aula A-106 de la Facultad de Ingeniería, en que realizó la dinámica de enfrentar a los docentes a concientizar su carga de trabajo académico, sumada a su vida personal, para darse el tiempo de expresar su estrés, fatiga, tristeza o enojo.
Esta dinámica se basa en el estado hipnagónico (referido al estado semiconsciente que precede inmediatamente al sueño), aunque en esta ocasión se trabajó de manera consciente. Así, la ponente solicitó a los y las académicas cerrar sus ojos y controlar la respiración (exhalando por la boca), a fin de conectarse a sus emociones, evaluar el dolor y desgaste (del 1 al 10) y visualizarlos en tres niveles: máximo, intermedio y bajo.
En cada nivel el profesorado debía ir reconociendo qué lo mantiene en vigilia y estresado, y proponer actividades (dormir, ejercicio, relajación, viajar, etc.) que lo ayudaran a resolverlos. "Siempre que tengamos un problema, primero debemos identificarlo, pues en algunos casos las cuestiones emocionales y mentales comienzan con el dolor físico (cuello, cabeza, tos). En esta dinámica la respiración y la exhalación por la boca es fundamental para aprender a sanar".
Los y las docentes mencionaron que la dinámica les ayudó relajarse, a sentirse mejor y acotaron que esto es muy bueno para renovar la actitud y convivencia con el estudiantado, sobre todo, porque es sano separar y no llevarse los problemas escolares a casa ni traer los personales al aula.
La experta en hipnoterapia puntualizó que un momento de paz cambia el estado de ánimo negativo a positivo, por ello, es importante este tipo de espacios en el que se pone atención al personal académico, la base de la formación: "Para ofrecer un proceso de enseñanza-aprendizaje de mejor calidad es preciso tener buen estado de salud físico, mental y emocional", concluyó.