La Secretaría de Posgrado e Investigación (SPI) convocó, el pasado 22 de noviembre, a una reunión de inicio del proyecto 4-A: Reordenamiento y fomento de la investigación y el desarrollo tecnológico del eje 4 del Plan de desarrollo 2023-2027 de la Facultad de Ingeniería, cuyo objetivo es fortalecer esas actividades sustantivas para alcanzar una mayor productividad académica y ampliar las fronteras del conocimiento. La doctora Aída Huerta Barrientos, secretaria de la SPI y responsable estratégica del proyecto, destacó que esta iniciativa se basará en un diagnóstico exhaustivo del estado presente, abarcando líneas de investigación, grupos, líderes académicos y la inclusión de jóvenes talentos, para potenciar las distintas áreas de competencia y las líneas específicas de cada grupo.
La titular de la SPI-FI defendió la reconfiguración del quehacer en investigación y desarrollo tecnológico, evaluando la pertinencia científica y social. Así como de los resultados obtenidos en las líneas vigentes para lograr su actualización y consolidación, con especial énfasis en promover estancias posdoctorales para fortalecer la excelencia académica. "Entre las metas propuestas, se incluye la definición de una línea dedicada a la investigación educativa y a la mejora de la docencia en el campo de la ingeniería", resaltó.
De igual manera, se propone intensificar las estrategias que promuevan la publicación de profesores de carrera en medios arbitrados a través de repositorios institucionales abiertos, y se promoverán foros académicos —coloquios, congresos y simposios — para compartir los resultados de investigaciones publicados. En cuanto a la gestión tecnológica y del conocimiento, se fomentará la solicitud de patentes, trámites sobre derechos autorales y la transferencia de tecnología, y se intentará redefinir los mecanismos que incentiven la participación del personal en programas institucionales y se buscarán fondos de financiamiento.
La revista Ingeniería, Investigación y Tecnología se fortificará al dotarla de la figura de editor en jefe y actualizando su política para ampliar su reconocimiento internacional; a la par, se incentivará la publicación conjunta de académicos y estudiantes en licenciatura y posgrado. En ese tenor, la Unidad de Apoyo Editorial también será fortalecida para agilizar procesos de revisión, arbitraje, publicación y adopción de formatos electrónicos, buscando convenios con editoriales externas para expandir el potencial y mediante una campaña para difundir artículos indizados en el Journal Citation Report (JCR) y difundir productos de desarrollo tecnológico e innovación generados por académicos de la entidad.
La Secretaria aclaró que los coordinadores académicos organizarán las acciones para el cumplimiento de los objetivos y metas, y serán responsables de tomar decisiones, mantener comunicación con las áreas involucradas, darán seguimiento a la ejecución de los trabajos y analizarán los resultados para realizar ajustes y cumplir el objetivo. Los integrantes del proyecto crearán y ejecutarán el plan de trabajo mediante el diseño de las estrategias de cada una de las etapas, la definición de objetivos y metas, la especificación del cronograma de actividades y una estrecha comunicación con los integrantes y coordinadores académicos.
Finalmente, dijo que los miembros de la comunidad jugarán un papel activo al expresar sus opiniones, proponer ideas y llevar a cabo acciones en relación con el plan de trabajo. Aportarán iniciativas concretas, las cuales serán minuciosamente examinadas y analizadas con el propósito de fortalecer el proyecto. En síntesis, se espera una participación dinámica y colaborativa de la comunidad para enriquecer y optimizar el desarrollo del proyecto.
