La Facultad de Ingeniería de la UNAM vivió un momento único el pasado 17 de octubre con la visita de Bardo Miranda, uno de los actores y directores de doblaje más renombrados de México. La charla con el artista, organizada por la División de Ciencias Sociales y Humanidades y enmarcada en la Semana de la Ciencia Ficción y la Comunicación Científica, ofreció un acercamiento íntimo a su trayectoria en la que ha dado voz a personajes icónicos como Barney Gumble de Los Simpson y Mr. Satán en Dragon Ball Z.
El evento, celebrado en el auditorio Javier Barros Sierra, fue una oportunidad para revivir anécdotas memorables de las series que marcaron a muchas generaciones y también para reflexionar sobre el arte del doblaje. Miranda, con una vasta carrera multidisciplinaria, recomendó perfeccionar la técnica actoral a quienes deseen incursionar en este campo. "El doblaje no es sólo ponerle voz a un personaje, es transmitir emociones y dar vida a una historia", aseguró.
Aunque ahora es conocido por sus voces inconfundibles, Bardo Miranda reveló que su primer amor fue la música y recordó con nostalgia que su incursión en el coro de la iglesia marcó el camino que lo llevaría al teatro: "Inicialmente, mi plan era estudiar odontología, pero el teatro me atrapó", y decidir formarse en el Centro de Arte Dramático bajo la dirección de Héctor Azar. También rememoró cómo su carrera en el doblaje tomó fuerza en los noventa, especialmente con Los Simpson. "No me preocupaba escuchar mi propio trabajo hasta que grabé los primeros episodios", señaló. A partir de ese momento, Barney Gumble y el Sr. Burns se convirtieron en parte fundamental de su carrera.
No obstante, su éxito en Los Simpson, uno de los mayores retos para el actor fue asumir la voz de Mr. Satán en Dragon Ball Z, por las altas expectativas de los fans, pero un consejo clave de Patricia Acevedo (directora del proyecto) lo ayudó a superar la presión: "Nadie es dueño de los personajes, ni siquiera nosotros". Así, Mr. Satán pasó de ser un reto intimidante a uno de sus personajes favoritos que más lo han marcado, junto a Barney Gumble, Soun Tendo en Ranma ½ y el narrador en Los Gatos Samurai
("¡Cadena! ¡Los Gatos Samurai, hagan sonar su cascabel, aunque estén muertos de miedo!", evocó con emoción).El actor también reconoció los desafíos que implica el doblaje como actor y director, por ejemplo, jóvenes con buena técnica, pero sin formación actoral para lograr interpretaciones más profundas, por lo que destacó la importancia de una enseñanza que fomente la mejora continua en lugar de castigar los errores. Para cerrar, Bardo Miranda reflexionó sobre el futuro del doblaje y su rol en la comunicación. "El doblaje tiene la capacidad de conectar con el público a un nivel muy profundo, es un arte que debemos cuidar y promover", afirmó. Así concluyó una tarde memorable de enseñanzas con una de las voces más queridas del doblaje en México.