Una espléndida y memorable ceremonia de graduación tuvo la sexta generación del Diplomado en Dirección de Organismos Operadores de Agua, en el Salón de Actos del Palacio de Minería el pasado 20 de marzo.

La ocasión reunió al doctor Carlos Agustín Escalante Sandoval, director de la FI, al maestro Roberto Ramírez de la Parra, director general de la Conagua, a los ingenieros Ramón Aguirre Díaz, presidente de la Asociación Nacional de Empresas de Agua y Saneamiento (ANEAS), y Roberto Olivares, gobernador del Consejo Mundial del Agua, al doctor Felipe Arreguín Cortés, director general del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua, y al maestro Víctor Manuel Rivera Romay, jefe de la División Continua y a Distancia de nuestra Facultad.

El primero en dirigir un mensaje a los graduados fue Víctor Rivera resaltando los motivos de orgullo que este logro representa: el haber estudiado un diplomado en la primera escuela de ingeniería en América, en una instancia experta como la DECDFI que celebra 45 años de existencia, y estar en el recinto majestuoso del Palacio de Minería. "Sin embargo, esto no significa nada si ustedes no derraman en la sociedad los beneficios de todo el conocimiento que han adquirido", aseguró.

"Dirigir un organismo operador de agua potable equivale a tener entre sus manos uno de los recursos más importantes de nuestro país", expresó en su oportunidad el doctor Felipe Arreguín Cortés, para a continuación aclarar que ésta es una actividad influenciada por múltiples y muy complejos factores, y, por lo mismo, digna de reconocimiento.

A continuación, el ingeniero Roberto Olivares apuntó la importancia de un diplomado como éste: propicia que quienes trabajan en organismos operadores de agua hablen el mismo idioma, favoreciendo así el manejo adecuado del vital líquido.

Por su parte, el ingeniero Ramón Aguirre Díaz realizó una comparación entre el agua y el aire, elementos equivalentes en su importancia para el ser humano pero de complejidades distintas: "El agua es un recurso limitado, requiere de una infraestructura para que podamos disfrutar de ella, tiene costos de operación y mantenimiento, y abusar de su uso tiene graves consecuencias", explicó.

Finalmente, el maestro Roberto Ramírez de la Parra enfatizó en que el agua es un tema de bienestar, desarrollo y de vida, por lo que es una oportunidad poder servir a todos los mexicanos mediante su administración.

"Felicito a todos ustedes que hoy concluyen el diplomado, estoy seguro de que en sus manos se encuentran los instrumentos actualizados que les permitirán desarrollar sus capacidades de dirección a fin de brindar un mejor servicio de manera sostenible y sustentable", dijo.

Esta generación dio como resultado 33 nuevos especialistas, de ellos, Mauricio Romero Lara fue distinguido durante la ceremonia con la medalla conmemorativa por los 200 años del Palacio de Minería por su alto promedio y excelente desempeño.

La clausura estuvo a cargo del doctor Carlos Agustín Escalante Sandoval, quien relató que el Diplomado es un proyecto académico conjunto entre la FI y la ANEAS, y que surgió con la intención de perfeccionar el desempeño de los directivos responsables de las empresas de agua y saneamiento. Cabe resaltar que la séptima generación está en curso y la octava inicia próximamente.

El Director felicitó a los graduados por tomar la decisión de continuar preparándose, ya que este esfuerzo representa quitarle tiempo al trabajo, la familia y a sí mismos. "Al final, el sacrificio significa un crecimiento no sólo profesional, sino también personal. Los conmino a continuar con esta grandiosa labor para que el agua sea operada con ética y eficiencia en favor de la sociedad", concluyó.